El nacimiento del vodka Pravda se remonta a 1743
y desde entonces su sabor ha ido mejorando constantemente.
En ese momento, el vodka estaba destinado a la nobleza
y se bebía en ocasiones especiales.
La joya de la botella da testimonio de la habilidad y la pasión inquebrantables
que hasta ahora han acompañado al fabricante de Pravda.
El agua utilizada para la producción proviene de los Cárpatos vírgenes,
donde fuentes profundamente ocultas proporcionan agua limpia y suave.