Curiosamente, a pesar de que el vodka es una bebida
típicamente rusa no está elaborada ahí, sino en Francia,
además tampoco está elaborado únicamente con cereales o tubérculos como es habitual,
sino que principalmente está hecho con uvas blancas de dos tipos:
la Mauzac Blanc de la región de Gaillac y la Ugni Blanc de la región de Cognac.
Al estar hecho con uvas tiene un sabor claramente diferente al vodka habitual,
a pesar de conservar la esencia de este, tiene un aroma distinto, y un sabor frutal.
Durante el proceso de la elaboración el Cîroc Vodka se destila 5 veces,
lo que hace que tenga al final de la destilación un contenido alcohólico muy alto (96 grados),
tanto que después de terminar el proceso de destilado tiene que mezclarse con agua para alcanzar los 40.
Al final se obtiene una bebida con mucha fuerza y cuerpo, de aroma suave y afrutado
un sabor suave pero duradero, también con la esencia de las frutas.
